El cambio de batería en vehículos eléctricos, una solución en auge para taxis y servicios de transporte parece que ha llegado para quedarse y es que a pesar de los numerosos desafíos, su futuro en el ámbito de los taxis y servicios de transporte compartido augura una gran proyección según un par de informes publicados Bloomberg New Energy Finance.
China ya cuenta con más de medio millar de estaciones de intercambio de baterías, lo que es una gota en el cubo de agua en comparación con las 112.000 estaciones de recarga que el gigante asiático instaló solo en diciembre de 2020.
Muchas de estas estaciones son operadas por el fabricante de automóviles chino Nio, para uso exclusivo de sus clientes. La compañía ya tiene alrededor de 180 estaciones y superó los 500.000 cambios de batería en mayo de 2021.
Desafíos del cambio de batería en vehículo eléctrico
Sin embargo, para que el intercambio de baterías compita realmente con la recarga, las estaciones deberán reparar vehículos de diferentes fabricantes. Es probable que eso sea un desafío, ya que requeriría que los fabricantes de automóviles acuerden los estándares de hardware, señalan en uno de los informes.
Estación y arquitectura de batería modular Ample (izquierda) y recarga de taxis eléctricos (derecha).
Sin embargo, los análisis de Bloomberg encontraron “algunas razones para el optimismo”. La red de intercambio de baterías de China está creciendo justo cuando muchas ciudades comienzan a cambiar a taxis eléctricos, y agregaron que, por ejemplo, la ciudad china de Shenzhen cambió sus 21.000 taxis a energía eléctrica en 2018.
La principal ventaja del cambio de batería son los tiempos de entrega rápidos (Nio ha manifestado que un cambio toma alrededor de tres minutos), lo que podría hacer que los taxis eléctricos sean más atractivos para los operadores.
En el pasado, la recarga pública ha sido el factor limitante para la usabilidad de las cabinas eléctricas en las principales áreas metropolitanas.
Si bien Estados Unidos no tiene una infraestructura de intercambio de baterías de la que hablar, California anunció que exigirá más vehículos eléctricos para el transporte privado. La Junta de Recursos del Aire del estado se encuentra actualmente en el proceso de determinar esas reglas.
La startup Ample incluso espera resolver el problema de interoperabilidad con sus propias estaciones y arquitectura de batería modular. Ample afirma que sus estaciones pueden completar un intercambio en 10 minutos y, según se informa, está trabajando con Uber en el intercambio de baterías para una flota de Nissan Leafs en San Francisco.
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